Hace un par de años, o algo más, vi en el Teatro Español la obra The Changeling, puesta en pie por la compañía inglesa Cheek by Jowl. No conocía ni la obra ni la compañía ni nada y todo me gustó mucho, pero hubo algo que me tocó muy adentro: De Flores, un criado físicamente repugnante, pero con el mismo derecho que el más hermoso de los príncipes al amor y a la felicidad. Este desequilibrio entre lo que dicho servidor tiene y lo que merece desencadena una violencia salvaje y un montón de cosas más que quedarán siempre en mí, no ya como una reflexión moral, sino cómo una experiencia personal. Esto fue así gracias al trabajo de William Keen, actor que encarnaba al personaje y que hizo que lo que a De Flores le sucedía, de alguna manera, sucediera también dentro de mí. No podía verbalizar por qué, solamente sabía que aquel siniestro criado estaba tan vivo como yo.
Meses más tarde me enteré de que aquel tipo inglés impartía un breve curso de interpretación en Madrid, utilizando textos de Shakespeare. Me apunté y descubrí asombrado que la obra de Shakespeare no es un universo distante en ningún sentido. Descubrí que Shakespeare habla de mis padres, de mis hermanos, de mis amigos, de mis vecinos, de los desconocidos con los que coincido en cualquier cafetería, de las personas que aparecen por la televisión, del mundo en el que vivo, de lo que me importa, de lo que hace que sea más desgraciado o más feliz. Descubrí un poder revelador y transformador que, en mi opinión, sólo puede nacer del amor por todo lo vivo, de un profundo amor hacia el ser humano y, por tanto, no de un deseo de juzgar y condenar, sino de una pasión por comprender y sanar.
Poco después de aquel curso hablamos de hacer Hamlet. Nos pasamos dos años hablando de hacer Hamlet pero sin dar un solo paso en esa dirección, hasta que un día, este señor inglés me dijo: “Empecemos la semana que viene. Juntémonos con algunos amigos y comencemos a investigar en la obra”. Así, sin más medios que el deseo, comenzamos con un taller de investigación por etapas que continuará hasta el comienzo de los ensayos, previsto para la próxima primavera.